Las estrías son un trastorno cutáneo que se produce cuando el tejido de la piel se rompe y deja una marca ancha en forma de retícula rojiza o violeta. Estos defectos aparecen comúnmente en las mujeres durante el periodo pre y post menopáusico, embarazo o ganancia y pérdida rápida de peso.
Aunque hay muchos factores que influyen en su aparición, la mala alimentación es una de las principales causas del desarrollo de estrías. En pocas palabras, si hay escasez de nutrientes necesarios para mantener el estado de la piel bien nutrido y saludable – como las vitaminas A, D y E – entonces es probable que aparezcan estrías.
Además, una dieta deficiente en nutrientes también puede disminuir el nivel de colágeno que contribuye al elasticidad de la piel, lo cual hace que la misma sea menos resistente al estiramiento y aparezcan las estrías.
Por otro lado, alimentarse bien es una manera segura de combatir las estrías, ya que ofrece una variedad de beneficios para la salud, lo que ayuda a mejorar la apariencia y condición de la piel. Para prevenir o disminuir el aspecto de los defectos cutáneos, recomendamos incluir los siguientes alimentos en la dieta:
– Lima limón: El contenido en vitamina C del limón le ayuda a mejorar el tono y la elasticidad cutánea mientras ayuda a reforzar el tejido conectivo de nuestra piel.
– Aguacates: Esta fruta tropical contiene ácidos grasos poliinsaturados, los cuales ayudan a mantener la hidratación natural.
– Nueces: También ricas en ácidos grasos poliinsaturados, se le atribuyen muchas propiedades beneficiosas para combatir los efectos secundarios causados por las estrías.
– Frutos secos: Aparte de ofrecer muchos nutrientes importantes, como minerales y vitaminas como los antioxidante A y E; el consumo de frutos secos es excelente para hidratar la piel desde adentro.
Es importante recordar entonces que para prevenir la aparición o posterior agravamientorasustarque hacerse cargo del problema desde la raíz: tener buenos hábitos y seguir una dieta saludable con todos los nutrientes necesarios para hidratar eficazmente la piel.
Las estrías son uno de los muchos problemas en los que suelen incurrir las mujeres. Estas líneas longitudinales de tejido conectivo fibroso suelen aparecer debido a factores como la pubertad, la edad avanzada, algunos trastornos hormonales y a una mala alimentación.
En esta última categoría, el consumo excesivo de sal, grasa, azúcar y falta de proteínas son los principales factores que influyen en el desarrollo de estrías. Consumir alimentos poco nutritivos e inadecuados (especialmente aquellos ricos en grasas saturadas y azúcares simples), llevar una dieta rica en calorías que no contemple todos los nutrientes esenciales necesarios para el organismo e incluso ayunar o seguir dietas poco recomendables provocan deficiencias nutricionales y desequilibrios hormonales que conducen al aumento de peso y a la presencia de estrías.
Por ello es importante llevar un plan alimentario saludable, variado y equilibrado, adecuado a nuestras necesidades nutritivas reales. Beber al menos 2 litros de agua diarios también contribuye a hidratar la piel y ayuda a prevenir diversos problemas dermatológicos como las estrías.
Otra alternativa para combatir el problema de las estrías en mujeres es la esfoliación corporal realizada mediante productos dermocosméticos específicos para regenerar la capa más profunda de la piel. Esto ayuda a minimizar la profundiza y tensión en la piel liberando la elasticidad natural eliminando así cualquier marca antiestética.